martes, 5 de enero de 2016

Insomnio

Hoy durante el día no me he sentido para nada bien, tuve miedo y tristeza, no tenía ganas ni motivos para levantarme y me deprimia por cualquier pretexto que se presentara, cada momento en el que no tenía nada que hacer, me venían recuerdos de mi papá, generalmente cosas malas, pero también en el hecho de que al momento de hacer la denuncia perdí a mi figura paterna. Debido a que no es la primera vez que me pasa tengo claro lo que me espera a la noche...
Ya es de madrugada, las inseguridades y miedos se intensifican. Pánico es lo que me causa la oscuridad, la tenebrosa sensación de que  cualquier cosa puede suceder, algo o alguien se puede presentar, un duende de bajo de la cama puede salir, un fantasma por la pieza puede rondar, un violador por la ventana entrar, incluso un ovni en la casa aterrizar. Situaciones absurdas que no puedo evitar imaginar. No quiero estar sola, no quiero cerrar la puerta y que está me impida salir corriendo, no quiero escuchar ningún ruido, sonido o murmuro ni nada que emita sonidos, solo quiero escuchar el silencio, quiero escuchar el sonido del que este a punto de atacar, los pasos que se aproximan, el filoso cuchillo salir de su ropa. No quiero mover un dedo estoy al cien por ciento de alerta. No me distraigo del silencio, no dejo de mirar la nada.
Atenta total, cada uno de mis nervios, mi piel, oídos, ojos, todos mis sentidos esperando la amenaza. Sentada en la cama con un pies en el suelo, preparada para salir corriendo.

No quiero pensar que estoy loca ya que a lo largo de mi vida,  a pesar de la Enfermiza padencia que habita en mi cabeza, siempre me he considerado normal, pero no puedo evitar preocuparme por el molesto ruido que pareciese ser un motor que suelo escuchar en mis peores momentos como el de ahora, miedos, insomnio, soledad. Lo he escuchado desde pequeña, por varios años desde el comienzo de mis temores, solo que antes no lo veía con la gravedad de ahora. Comencé a darme cuenta que era algo solo mio cuando le preguntaba a las personas a mi alrededor si lo escuchaban, me miraban como si hablara en otro idioma, claro no entendían nada y decidí jamás hablar del tema con otros semejantes. Aveces el ruido era leve y podía soportarlo, Aunque otros días sentía como si un camión estuviera fuera de la casa, se complementaba perfectamente con mis temores y provocaba un mayor incremento en el insomnio. Tanto era la irritación del ruido que algunos días salía a la calle a buscar ese '' Camion'', jamás lo encontré, al menos no cerca como para provocar tal molestia. Quiero que se termine.

Creí escuchar un ruido, se me ocurre un millón de cosas desde ha en  duende, alguien tratando de entrar a la casa o simplemente el perro de al lado. No quiero ser negativa y menos en esta situación pero solo espero lo peor ahora. Optó por fin por prender la luz para espantar al menos a los fantasma y tener un mayor alcanse de visión,esto y escribir me logran distraer al menos u  poco, solo para no ponerme a llorar o gritar o salir corriendo por el solo hecho de temer que pase algo... Siento náuseas y dolor de estómago pero anulo completamente la idea de salir de la habitación incluso para ir al baño.
Odio la noches en el Hogar

miércoles, 30 de diciembre de 2015

Sueño: Ignorancia

Estaba en la casa de mi bis abuela paterna, pero no había ningún familiar,  solo era algún tipo de reunión de amigos de mi Papa qe el normalmente hacia una vez al mes. A algunos los conocía,  pero la mayoría era completamente extraños aunque conocidos o no,  no estaba para nada cómoda ni por el ambiente ni por las personas qe me rodeaban. Decidí irme a una de las habitaciones para llamar la privacidad y el confort,  entrar en mi mundo de pensamientos tranquilos y abstractos, escuchar música placentera para mis oídos y escapar de la realidad (aunque poco había de ella puesto qe era un sueño). Todo eso desaparecer al darme cuenta que la cortina era bastante transparente y varios pudieron verme a través de la ventana derrumbando la pared que protegía mi intimidad mental. Ya sabiendo que estoy ahí comienzan a insistir en que salga a compartir con todos, de mala gana accedo. Al salir veo qe todos están en el patio sentados en un círculo.  Persisten en la idea de que me siente al lado de mi padre, este me mira y veo una sonrisa fingida emerger de su rostro,  depravación en su mirada e inquietud en sus manos como si quisiese amasar mi cuerpo y moldearlo a su manera. Bajo presión  accedí, pero se me hace imposible quitarme el desagrado e incomodidad que cubre mi sensible piel. Pasan minutos a la que veo como horas,  todos hablan pero a nadie oigo, todos me miran pero nadie me observa. En lo más lejano de mi cabeza oigo voces hambrientas sugiriendo pizza,  cuando vuelvo en mi veo a todos traer los ingredientes poco usuales.  Madera, clavos,  cartón, quedo sorprendía pero no me alcanzan a salir palabras de entre los labios,  como si no tuviera fuerza para levantarlos. Todos la comen sin deslumbro, veo como cada pedazo de dientes se rompen y saltan de su boca,  sin causarle ni hyuna reacción.  Al acabar todos contentos celebran hasta que ven mi pequeño y grotesco pedazo intacto, me miran como si la piel se me cayera de a poco y me hacen pensar que yo soy la rareza andante después de todo. Comienzan a gritar reiteradamente en forma de apoyo que coma la inusual pizza, como si no supieran el daño que me causa a mi y les causó a ellos. Ignorancia Total. Intimidada e Incomodamente muerdo aquel trozo creado por la estupidez humana y...
DESPIERTO

martes, 22 de diciembre de 2015

22 diciembre 2015

Quedan 2 días para navidad. Estoy Calmada, no siento resentimiento ni rechazo a la fecha a pesar de la desgraciada vida qe me toco, quizás porqe era el único periodo de tiempo qe me sentí con calma durante el infortunio. Pero debo decir qe tampoco siento entusiasmo ni atracción.
Las mejores navidades que recuerdo fueron durante mi estadía en la casa de mi abuela paterna. La pasaba bien por varias razones; se reunía toda la familia,  eran muchos lo cual significaba mucha diversión, muchos regalos, mucho caos. También era la única niña en la familia por lo tanto también era la regalona. Era una familia grande,  numerosa, nunca te aburrias, habían panoramas por doquier, lamentablemente eso se perdió. Mis padres querían privacidad y la comodidad de vivir solos y yo como una niña qe solo qeria estar con mis amigos me costó entenderlo. Pero si me di cuenta qe se alejaron más de lo que  esperaba, al punto de estar completamente sola. Mis primos ya no me hablaban, no me invitaban a sus fiestas de cumpleaños, ya no contaban conmigo para las vacaciones ni excursiones. Y así fue por los años, se olvidaron completamente de mi,  y con la denuncia ya no fue solo eso. Me despreciaron, me suprimieron de sus vidas. Pienso que así lo quiso mi padre. Que estuviera sola, que no pudiese contar con nadie, no tener a quien acudir, quebró mi capacidad de comunicación con otras personas, me retuvo en una prisión psicológica,  me encerró en un cuarto del qe me ha tomado años salir, una habitación en lo más profundo de mi mente, después de un largo laberinto de arbustos más grandes que pueden existir, seguido de una gran muralla de 20 metros,  imposible de escapar,  una habitación donde sólo el tenía las llaves, podía entrar y salir cuando quisiese. Jamás la uso para el bien.